Estos canelones siguen la receta que mis padres han hecho siempre en mi casa, como aprovechamiento de la carne del cocido. Si un día había cocido para comer, al día siguiente tocaban canelones. Yo he aprovechado un muslo y contramuslo de pollo que me sobró de un asado. ¡A por la receta!
Ingredientes: (para dos personas)
1 muslo y contramuslo de pollo asado/cocido
Un poquito del caldo del asado/cocido (si no tienes, puedes usar leche)
1 lata de paté de hígado de cerdo
8/10 láminas de canelones
30 gr. de mantequilla
1 cucharada de harina
1/2 litro de leche
Sal
Nuez moscada
Queso rallado para gratinar (opcional)
Preparación:
Limpia la carne de huesos y desmígala. Tritúrala junto con el paté, con ayuda de una batidora. Este será el relleno para los canelones. Si ves que la masa queda muy pesada, aligérala con un poco del caldo o con un poco de leche. Reserva.
Vamos a hacer la bechamel. En un cazo antiadherente pon la mantequilla en trozos y lleva al fuego hasta que se derrita pero sin que coja color. Añade ahora la harina y cocínala en la mantequilla sin dejar de remover. Incorpora poco a poco la leche, mezclando continuamente con unas varillas, a fuego medio, y añade sal y nuez moscada rallada al gusto. Cocina durante 10 minutos y reserva.
Cuece las láminas de pasta en abundante agua salada. Cuando lo hagas, introdúcelas una a una para que no se peguen entre sí. Escúrrelas bien y colócalas sobre un paño limpio. Pon una cucharada del relleno y enrolla los canelones.
Pon una cucharada de bechamel en el fondo de la fuente que vayas a usar para disponer los canelones, y colócalos. Baña con la bechamel restante y ralla queso para gratinarlos después. Hasta este paso puedes tenerlo hecho con antelación y conservarlos en el frigorífico (o incluso congelarlos).
Gratina en el horno y sirve.
Consejos:
- Como es un plato laborioso, puedes hacer más cantidad y congelar. Recuerda entonces congelarlos en un recipiente apto para horno.
- La bechamel saldrá sin grumos si incorporas la leche poco a poco sin dejar de remover con las varillas. Te puede ayudar incorporar la leche caliente.