¿Quién se resite a unas buenas almendras fritas como aperitivo? Junto a unas aceitunas son un clásico. Aquí os traigo las que hacemos desde siempre en casa, que nada tienen que ver con las que venden envasadas: su sabor es mucho más rico y el punto de sal lo decides tú. Y ya solo queda decidir si tomas una cerveza, un vinito blanco o un zumo...
Ingredientes:
Almendras peladas
Aceite de oliva
Sal
Preparación:
Pon abundante aceite en una sartén y calienta. Cuando empiece a humear incorpora las almendras. A fuego medio, ve moviéndolas continuamente hasta que cojan color. Sácalas a un plato con papel absorbente y añade la sal. Deja enfriar y conserva en un recipiente hermético.
Consejos:
- No las dejes muy tostadas antes de sacarlas del aceite, ya que las almendras siguen friéndose incluso fuera del aceite por unos minutos y te quedarán muy oscuras e incluso amargas.
- Se conservan muy bien en un recipiente hermético, así que yo normalmente hago una cantidad bastante grande y tengo para varias ocasiones.
¡Que ricas! si llevo el vermouth, ¿me invitas? ;-)
ResponderEliminarUn beso, guapa, espero que hayas entrado bien en 2013.