viernes, 28 de junio de 2013

Champiñones rellenos de queso de cabra

Esta tapita se hace en quince minutos, cinco para prepararla y diez en el horno. Otra forma de comer champiñones, siempre tan ricos... Con los portobello también queda muy bien y hay más donde rellenar porque son más grandes: ten en cuenta entones que necesitarán más tiempo de horneado. 


Ingredientes:
Champiñones
Queso de cabra
Miel

Preparación:
Precalienta el horno a 200 grados. Pon una lámina de papel de hornear en tu bandeja de horno.

Limpia los champiñones y retírales el pie. Rellénalos con el queso de cabra con ayuda de una cucharilla. Pon un chorrito de miel encima de cada uno. 


Mételos en el horno, a media altura, durante 10 minutos y sírvelos calientes.


Consejos:
- No necesitan sal porque el queso ya les proporciona gran sabor.
- Puedes hacerlos en la barbacoa, como una guarnición diferente o como una alternativa más a los vegetarianos.
- Puedes usar otro queso para rellenar (gorgonzola, por ejemplo)

miércoles, 26 de junio de 2013

Canelones de pollo y paté

Estos canelones siguen la receta que mis padres han hecho siempre en mi casa, como aprovechamiento de la carne del cocido. Si un día había cocido para comer, al día siguiente tocaban canelones. Yo he aprovechado un muslo y contramuslo de pollo que me sobró de un asado. ¡A por la receta!


Ingredientes: (para dos personas)
1 muslo y contramuslo de pollo asado/cocido
Un poquito del caldo del asado/cocido (si no tienes, puedes usar leche)
1 lata de paté de hígado de cerdo
8/10 láminas de canelones
30 gr. de mantequilla
1 cucharada de harina 
1/2 litro de leche
Sal 
Nuez moscada
Queso rallado para gratinar (opcional)

Preparación:
Limpia la carne de huesos y desmígala. Tritúrala junto con el paté,  con ayuda de una batidora. Este será el relleno para los canelones. Si ves que la masa queda muy pesada, aligérala con un poco del caldo o con un poco de leche. Reserva.

Vamos a hacer la bechamel. En un cazo antiadherente pon la mantequilla en trozos y lleva al fuego hasta que se derrita pero sin que coja color. Añade ahora la harina y cocínala en la mantequilla sin dejar de remover. Incorpora poco a poco la leche, mezclando continuamente con unas varillas, a fuego medio, y añade sal y nuez moscada rallada al gusto. Cocina durante 10 minutos y reserva.


Cuece las láminas de pasta en abundante agua salada. Cuando lo hagas, introdúcelas una a una para que no se peguen entre sí. Escúrrelas bien y colócalas sobre un paño limpio. Pon una cucharada del relleno y enrolla los canelones.


Pon una cucharada de bechamel en el fondo de la fuente que vayas a usar para disponer los canelones, y colócalos. Baña con la bechamel restante y ralla queso para gratinarlos después. Hasta este paso puedes tenerlo hecho con antelación y conservarlos en el frigorífico (o incluso congelarlos).


Gratina en el horno y sirve.


 Consejos:
- Como es un plato laborioso, puedes hacer más cantidad y congelar. Recuerda entonces congelarlos en un recipiente apto para horno.
- La bechamel saldrá sin grumos si incorporas la leche poco a poco sin dejar de remover con las varillas. Te puede ayudar incorporar la leche caliente.

domingo, 23 de junio de 2013

Pan de molde rápido (en panificadora)

Lo confieso. No he podido resistirme a comprarme otro cacharro de cocina... Y es que no tenía panificadora en casa, y después de pensármelo, he sucumbido y me he comprado una de las pequeñas, capaces de hacer panes de 600 o de 750 gramos. No tienen un precio muy elevado y consumen poquita electricidad. Además, ahora en verano nos permite hornear panes y bizcochos sin sufrir el calor del horno. Ahora el reto está en sacarle todo el partido posible. 

Y aquí está mi primer pan decente. Porque hubo otros intentos anteriores que no podían ser llamados ¨pan¨. Lo curioso es que este está hecho con el programa ¨SuperFast¨ de mi panificadora, así que tenemos pan en 58 minutos. 


Ingredientes: (pan de 600 gr.)
300 gr. harina de fuerza
200 ml. agua
1 cucharada sopera de aceite de oliva
1/2 cucharada de azúcar
1/2 cucharada de sal
8 gr. levadura seca de panadero

Preparación:
Pon la mitad de la harina en la cubeta de tu panificadora, a la que habrás encajado el aspa mezcladora. Añade los líquidos y la sal y el azúcar. Agrega el resto de la harina.

Pon la panificadora en marcha en el programa SuperFast I (el mío es el número 6 y no permite elegir el grado de tostado del pan) y empieza a mezclar los ingredientes. Cuando esté casi mezclado, incorpora la levadura.

Una vez mezclada la masa, retira el aspa antes de que comience el levado. 

Deja trabajar al aparato... y cuando finalice, saca el pan y déjalo enfriar sobre una rejilla. Ya verás la miga tan blandita que tiene. Disfrútalo como más te guste: unos sandwiches son una buena opción, ¿no?



Consejos:
- La levadura seca no son los polvos de hornear. Fíjate bien cuando la incorpores a la masa.

viernes, 21 de junio de 2013

Ensalada de bulgur

El bulgur es un alimento elaborado a partir del trigo, con características nutricionales similiares al arroz o al cuscús. Es muy típico en Oriente Medio, África del Norte y Turquía. Con él he preparado una ensalada, para así darle la bienvenida al verano. Una receta fresquita para los días que nos esperan.


Ingredientes: (para 2 personas)
1/2 vaso de bulgur
1 vaso de agua
2 tomates 
1 pepino
1 rama de menta fresca
Zumo de medio limón
Aceite de oliva virgen extra
Sal

Preparación:
En las instrucciones de tu envase de bulgur vendrá la forma de hidratar el grano, pero lo normal es poner el doble de cantidad de agua hirviendo que de bulgur en un recipiente tapado y dejar que se hidrate durante 15/20 minutos.


Mientras tanto, pela los tomates y el pepino y córtalos en cuadraditos. Déjalos escurrir. Una vez el bulgur está hidratado, añade el tomate y el pepino y la menta fresca picada.


Agrega sal, el zumo de medio limón y aceite de oliva y mezcla bien. Ya la tienes lista para servir. Decora con aceite de oliva y una lámina de pepino.


Consejos:
- Si no escurres el tomate y el pepino, dejarán su exceso de agua en la ensalada. Puedes optar por escurrirla después, una vez hecha y reposada en la nevera durante media hora.
- Puedes sustituir el bulgur por cuscús o arroz.

miércoles, 19 de junio de 2013

Solomillo de ternera con melón

Un rico solomillo de ternera acompañado de una salsa de cebolla y puerro y de unas bolitas de melón a la plancha. No te podrás resistir...


 
Ingredientes: (para 2 personas)
2 solomillos de ternera
1/2 melón 
1/2 cebolla
1 puerro
15 gr. mantequilla
1/2 vaso de vino tinto
1/2 vaso de leche
Sal 
Escamas de sal
Pimienta
Aceite de oliva

Preparación:
Comencemos por preparar la salsa que acompañará al solomillo. Mientras, saca el solomillo del frigorífico, pues se cocina mejor si está atemperado.

Pela la cebolla y el puerro y trocéalos. Pon la mantequilla en un cazo y sofríe la cebolla y el puerro con una pizca de sal, a fuego lento. Añade el vino y deja reducir. Cuando no quede vino, añade la leche y cocina durante unos 5 minutos más. Tritura con una batidora y rectifica de sal. Pasa por un colador para que la salsa quede más fina y reserva.


Precalienta el horno a 150 grados. Pon unas gotas de aceite de oliva en una sartén y marca los solomillos (sin sal, para que no pierdan los jugos) e introdúcelos en el horno durante 5 minutos (así la carne quedará al punto; si te gustan más hechos, necesitarás más tiempo de horneado)

Mientras se cocina la carne, haz las bolitas de melón en la misma sartén dinde marcaste los solomillos. 

Emplata los solomillos con un poco de la salsa y con las bolitas de melón. Pon escamas de sal sobre la carne.


Consejos:
- La salsa la hice con leche, pero con nata líquida ligará antes (aunque también añadirás más calorías)

lunes, 17 de junio de 2013

Milhoja de crema y fresas



Hacía mucho que no publicaba un postre. A cambio del tiempo de espera, os traigo este que se hace en un "plisplas" (lo preparé mientras se hacía la cena) y que queda muy aparente además de rico. La crema que lleva no es casera, sino hecha con los preparados para flan que venden en los supermercados; no es lo mismo que una crema de verdad, pero el sabor es rico y nos ayuda a economizar nuestro tiempo en la cocina.
 


Ingredientes:
1 placa de hojaldre
1/3 litro de leche
1 sobre de preparado para flan
3 cucharadas de azúcar
Fresas
Azúcar glass (para decorar)

Preparación:
Saca la lámina de hojaldre del congelador si es que estuviese congelada; si es refrigerada, sáltate este paso.

Pon parte de la leche a calentar con el azúcar y disuelve el preparado para flan en la leche fría restante. Haz la crema según las instrucciones del envase. Deja atemperar y mete en una manga pastelera que llevarás al frigorífico.

Precalienta tu horno a 200 grados. Corta tu hojaldre en cuadrados (o en círculos, como más te guste) contando que necesitas dos trozos para cada pastelito. Coloca cada uno de ellos entre dos papeles de hornear y mételos en el horno con peso encima (y así evitaremos que el hojaldre suba). Hornea unos 15 minutos y deja enfriar.

Mientras, lava las fresas y retírales el pedúnculo.


Sobre una placa de hojaldre ya fría, haz pequeñas bolitas de crema hasta rellenar la plancha. Coloca el otro hojaldre encima, decora con las fresas y espolvorea con azúcar glass.



Consejos:
- El tiempo de horneado es orientativo.
- Puedes sustituir la crema por nata montada, siempre que sea de más de un 35% de materia grasa (para que monte bien y no se baje)


jueves, 13 de junio de 2013

Albóndigas en salsa

Aunque ya hay otra receta de albóndigas en salsa en el blog, esta es sin duda la salsa definitiva. Buscaba el sabor de las albóndigas en conserva (que a mis hermanos y a mí nos ha gustado tanto desde pequeños) y aquí está... 


Ingredientes: (para 18 albóndigas)
Para las albóndigas:
300 gr. de carne de ternera picada
1 huevo
2 rebanadas de pan del día anterior
Una taza de leche
1 diente de ajo
Sal
Pimienta negra
Harina para rebozar

Para la salsa:
1 puerro
1 cebolla mediana
1 tomate
1 diente de ajo
1 vaso de vino blanco
300 gr. guisantes 
1 cucharadita de azúcar
Sal
Aceite de oliva


Preparación:
Comencemos con las albóndigas. Pon el pan duro a remojar en la leche. En un bol grande coloca la carne picada e incorpora una pizca de sal y de pimienta negra molida, el huevo (sin cáscara, ¡jeje!), el diente de ajo pelado y muy picado, y el pan escurrido después de haber estado a remojo durante unos minutos. Mezcla bien esta masa y una vez los ingredientes estén integrados, haz bolitas. Reboza las bolitas en harina y reserva.

Pela la cebolla, el tomate y el puerro y pícalos, teniéndolos así listos para hacer la salsa. 

Pon aceite de oliva en una cazuela y fríe las albóndigas, retirando el exceso de harina que puedan tener. Sácalas a un plato con papel absorbente y resérvalas. 

En esa misma cazuela, sofríe las verduras (cebolla, puerro, ajo y tomate) con una pizca de sal y la cucharadita de azúcar. Incorpora los guisantes y deja un par de minutos. Echa ahora las albóndigas y el vino y deja reducir, mientras mueves la cazuela. Cubre con agua, añade una pizca más de sal y hierve durante 30 minutos a fuego medio-bajo. Sírvelas calientes.


Consejos:
- Si te queda mucho aceite en la cazuela tras freír las albóndigas, retira el sobrante antes de sofreír las verduras para hacer la salsa y evitarás una salsa extremadamente grasienta y difícil de comer. 
- El tiempo de cocción dependerá de lo grandes que hagas las albóndigas, así que controla que estén bien cocinadas.
- Puedes congelarlas una vez cocinadas y frías en un tupper. 
- Las patatas fritas son su mejor guarnición.

miércoles, 12 de junio de 2013

Tzatziki con salmón a la plancha

El tzatziki es una salsa tradicional de la cocina griega y búlgara. Se suele comer con pan de pita, a modo de aperitivo (por eso lo he etiquetado como tal aunque lo usemos de salsa en el plato de hoy). Sus ingredientes principales son el pepino y el yogur y puede ir aromatizado con hierbas, normalmente con menta fresca. ¡Vamos a por la receta!


Ingredientes
Para el tzatziki:
1 pepino
1 yogur griego natural
1 diente de ajo
1/2 limón
Menta fresca
Sal
Para el plato principal:
Patatas 
1 diente de ajo
Salmón fresco 
Aceite de oliva
Sal

Preparación:
Lava bien el pepino y rállalo. Pela el diente de ajo y rállalo también. Coloca ambos ingredientes en un escurridor durante 30 minutos. 


Una vez eliminado el exceso de agua del pepino, ponlo en un plato y añádele el yogur griego y un ramillete de hojas de menta bien picadas. Agrega un poco de sal y unas gotas de limón y mueve para mezclar los ingredientes. Ya tenemos lista la salsa. Si vas a utilizar la salsa para acompañar un plato, mantenla en el frigorífico hasta el momento de servir. 


Pela unas patatas y ponlas a cocer en abundante agua con sal y un diente de ajo. Cuécelas hasta que estén tiernas. Haz tu salmón fresco a la plancha, con un poco de aceite de oliva y sal y sirve.


Consejos:
- El sabor del ajo puede resultar demasiado potente en el tzatziki, así que ante la duda es mejor poner menos cantidad y agregar algo más después de probarlo.
- Si pones el yogur desnatado y acompañas con unos crudités de verduras (como estos) tendrás un aperitivo de lujo y con mínimas calorías. 

martes, 11 de junio de 2013

Ensalada de sandía con crema de queso

El otro día pensé que si el tomate y la sandía funcionaban bien en un gazpacho, ¿por qué no en una ensalada? Quería preparar un plato ligero y acompañé la ensalada con una crema hecha de queso de untar, cebolleta y pepinillo, una mezcla que va muy bien con la sandía. ¿Te animas?


Ingredientes:
Sandía sin pepitas
Tomate de ensalada
Queso de untar (yo usé la versión light)
Pepinillos en vinagre
Cebolla tierna

Preparación:
Trocea la sandía en cubos del tamaño de un bocado (o puedes usar también un sacabolas). Pela el tomate y trocéalo en cubitos. Dispón en el plato donde vayas a servir la ensalada los cubos de sandía y sobre ella los cubos de tomate.

Pica la cebolla tierna y ponla en un bol. Pica varios pepinillos en vinagre, previamente escurridos y secados con papel de cocina. Añade queso de untar al gusto y mezcla bien. Haz una quenelle y disponla sobre la ensalada. Sirve inmediatamente.


Consejos:
- No pongo cantidades porque dependerá del tamaño de tu ensalada.

lunes, 10 de junio de 2013

Ragú de ternera con penne

Este ragú de ternera está tan rico que tienes que probarlo sí o sí. Acompaña fenomenalmente bien a cualquier pasta, en este caso penne, pero eso ya lo dejo a tu elección. Con este plato comeremos ternera para guisar sin comer un guiso. Le puse mozzarella que fundí en el horno, pero en realidad la salsa no necesita ningún acompañamiento más que un buen tenedor. Hay quien dice que esta es la verdadera salsa para pasta, y no la que se suele hacer con carne picada... y me dirás cuál prefieres.


Ingredientes: (para 4 personas)
400 gr. pasta
350 gr. ternera para guisar
2 zanahorias 
2 dientes de ajo 
1 pimiento rojo
1 cebolla
350 gr. tomate frito
125 ml. agua
1/2 cucharadita de cayena molida
Albahaca fresca
Sal
Aceite de oliva

Preparación:
Pela la cebolla y los ajos y pícalos. Lava las zanahorias y el pimiento rojo y pícalos también.


Sofríe las verduras con una pizca de sal en una cazuela con un chorrito de aceite de oliva. Una vez pochadas las verduras, añade la carne y sofríe por unos minutos con un poco más de sal.


Agrega el tomate frito y medio vaso de agua, junto con la cayena molida, y deja cocinar a fuego medio-bajo durante 30 minutos (o hasta que la carne esté tierna). Cuando la salsa esté lista, echa las hojas de albahaca finamente picada. Retira del fuego y reserva.


Cuece la pasta según las instrucciones del fabricante en abundante agua salada y mezcla con la salsa. Puedes añadir queso y gratinar el plato.

Consejos:
- Si no tienes albahaca fresca, añade una cucharada de albahaca seca en el momento en el que agregas el tomate frito y el agua.
- La cayena es opcional, así como la cantidad que agregues de la misma.
- El tomate frito es mucho mejor casero, pero con uno en conserva el resultado también es muy bueno (como te muestro en la receta de hoy)
- Ya sabes que los platos de pasta son ideales para llevar en el tupper donde tú quieras.

miércoles, 5 de junio de 2013

Risotto de berenjena y tomate natural

Desde que vi esta receta en Gastronomía&Cía supe que tenía que hacer este plato de risotto, y la verdad es que no decepcionó.  Seguro que la repetimos en más de una ocasión. Aquí tenéis mi versión. 


Ingredientes: (para 2 personas)
200 gr. arroz arborio
1/2 berenjena
150 gr. tomates
1/2 vaso de vino blanco
2 dientes de ajo
1 cebolla mediana
50 gr. queso parmesano rallado
2 cucharadas de albahaca seca
1/2 cucharada de azúcar
Caldo de verduras
Sal
Aceite de oliva

Preparación:
Lava la berenjena y córtala en pequeños trocitos. Pon estos trocitos en un colador, ponles sal y deja escurrir durante 30 minutos.

Mientras tanto, escalda los tomates en agua caliente y quítales la piel. Trocéalos y resérvalos. Pela la cebolla y los ajos y pícalos.

Calienta tu caldo de verduras, pues deberás agregarlo poco a poco y caliente a lo largo de la elaboración del risotto.

En una sartén honda pon 3 cucharadas de aceite de oliva y sofríe la cebolla y los ajos con una pizca de sal. Cuando estén pochados añade la berenjena. Cuando empiece a dorarse la berenjena, agrega el tomate con una pizca de sal y el azúcar y sofríe un par de minutos más. Pon ahora el arroz y el vino. Una vez el arroz haya absorbido el vino, pon la albahaca seca y comienza a añadir el caldo de verduras: recuerda que debe estar caliente y que no incorporarás el siguiente vaso de caldo hasta que el anterior no haya sido absorbido por el arroz. Debes estar  moviendo durante este proceso de cocción. 

Una vez el arroz esté cocido, incorpora el queso rallado y mueve bien para que se integre. Sírvelo inmediatamente decorado con lascas de parmesano o con una lámina de jamón crujiente, que puedes hacer fácilmente siguiendo estas instrucciones. Buen provecho.


Consejos:
- Puedes usar arroz bomba si no encuentras arroz arborio.
- Puedes añadir taquitos de jamón al arroz y lo convertirás en un plato más completo. Si lo haces, asegúrate del punto de sal del caldo que utilices o correrás el riesgo de un arroz salado.
- Aunque la receta original dice que no es necesario pelar los tomates, considero que el bocado es mucho más fino si se les retira la piel, pero este paso es opcional.

martes, 4 de junio de 2013

Croquetas de pollo

No conozco a nadie que se resista a unas croquetas caseras. Las de hoy son de pollo. Están hechas con una pechuga ya cocida que puse como extra en un caldo de pollo y verduras, así que te valdrá cualquier sobra de pollo de cualquiera de tus guisos. 


Ingredientes:
1 pechuga entera de pollo (ya cocida)
1 cebolla
2 cucharadas de harina
1 vaso de leche
50 gr. de mantequilla
Nuez moscada
Sal
1 huevo
Pan rallado (yo usé panko) 
Aceite para freír

Preparación:
Pica finamente la pechuga ya cocida y reserva. Pela la cebolla y pícala también.

Pon la mantequilla en una sartén honda. Cuando se haya diluído echa la cebolla y póchala con un poco de sal. Cuando esté transparente y blandita, añade el pollo bien desmenuzado y cocina un par de minutos. 

Agrega la harina y cocínala un poco para que pierda su sabor. Añade poco a poco y sin dejar de remover la leche, hasta que quede una bechamel bien espesa. Pon ahora la nuez moscada y una pizca de sal. Deja enfriar esta preparación en una fuente.

Pasadas unas horas, la masa de croquetas estará fría y podremos manipularla. Haz las croquetas con el tamaño y forma que desees y reboza cada una de ellas en huevo batido y en pan rallado. Si ves que tienes demasiadas, es el momento de congelarlas. Yo las guardo en un tupper adaptando su tamaño y forma a la capacidad del recipiente y las tengo listas para consumir cualquier otro día. Recuerda que no tienes que descongelarlas para usarlas: fríelas como las que venden en las grandes superficies, a fuego medio para que no te queden frías por dentro.


Solo te queda freír las croquetas en abundante aceite. Yo suelo poner un diente de ajo en el aceite cuando hago este tipo de frituras: me sirve para ver la temperatura del aceite y para que su sabor no predomine sobre lo que estoy friendo (lo uso también cuando frío los filetes empanados).  Dóralas bien y sírvelas calientes.


Consejos:
- Si la bechamel no es uno de tus fuertes en la cocina, no la hagas junto a la cebolla y el pollo, sino en una cazuela aparte. Añádela después y sigue el proceso. Así evitarás los indeseados grumos.
- Debes dejar enfriar totalmente la mezcla o no podrás manipularla. Conforme vaya enfriando irá solidificando.
- Si la masa te queda un poco blanda, puedes rebozar las croquetas en harina antes del huevo batido y el pan rallado: eso te ayudará a que conserven su forma antes de freírlas.

lunes, 3 de junio de 2013

Crema de calabacín y espárragos

Como parece que el frío no quiere irse, os traigo otra crema de verduras ideal para comenzar una comida o para hacer una cena ligerita. 
 
 

Ingredientes: (4 raciones)
1 calabacín grande
1 cebolla
300 gr. espárragos verdes
1 vaso de leche
Sal
50 gr. mantequilla
1 cucharadita de aceite de oliva
Queso parmesno (opcional)

Preparación:
Lava el calabacín y trocéalo. Pela la cebolla y trocéala. Corta los espárragos en trozos y reserva las puntas.

Pon la mantequilla en una cazuela y sofríe la cebolla con un poco de sal. Cuando esté pochada añade el calabacín y los espárragos troceados. Rehoga bien las verduras y añade 2 vasos de agua y una pizca más de sal. Deja hervir a fuego lento durante 15 minutos.

Tritura con la batidora y agrega la leche. Rectifica de sal si fuese necesario.

En una sartén pon un poco de aceite de oliva y saltea las puntas de los espárragos. Sirve la crema caliente con las puntas de los espárragos y lascas de queso parmesano.

Consejos:
- Puedes añadir especias a esta crema si así lo prefieres: pimienta negra, nuez moscada, etc.
- Si suprimes la mantequilla y usas un poquito de aceite de oliva y sustituyes la leche por leche desnatada, obtendrás un primer plato de lo más light.